Educación STEAM
En esta página se expone la forma en que CyTA lleva adelante la educación científica a través de los procesos de enseñanza-aprendizaje basados en la Enseñanza Activa, bajo el Modelo STEAM (Science, Technology, Engineering, Arts and Mathematics).
A medida que el mundo se vuelve más interconectado y competitivo, el conocimiento científico y tecnológico se expanden y surgen nuevas oportunidades y desafíos; es así que la investigación, el desarrollo, la innovación y las prácticas en educación científica deben atender a las necesidades justas y concretas de la sociedad, que conlleven al desarrollo socioeconómico.
CyTA trabaja para que a través de la educación STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) se fomente el crecimiento económico, y el desarrollo social que permita nuevas o mejores oportunidades para alcanzar el bienestar para todos; consecuentemente trabajamos para promover las mejores formas de impartir una educación que permita encontrar soluciones basadas en evidencias.
1. Educación Científica
CyTA busca constituirse en un Centro de Capacitación, Información e Investigación Educativa; para ello el área de Educación Científica y Tecnológica de CyTA se ocupa de la elaboración de cursos formativos, de pre-iniciación científica, de iniciación científica y de posgrado, orientados a las actividades docentes, y para distintos campos disciplinares.
Todos los cursos se encuentran enmarcados en la concepción de Enseñanza Activa, que implica un aprendizaje basado en proyectos «investigación-acción», por lo que las actividades de investigación y extensión se complementan con la participación en proyectos de investigación.
Es importante destacar que la capacitación, se organiza en diversas unidades curriculares como ser: módulos temáticos con unidad de sentido, seminarios, asignaturas, talleres, ateneos, trabajos de campo, entre otros.
2. Enseñanza Activa
A través de la Enseñanza Activa, buscamos atender la necesidad de relacionar los recientes logros de un campo disciplinar, con las actividades académicas y en particular con el proceso de enseñanza-aprendizaje. En nuestro caso, la «Enseñanza Activa» asume el modelo de «Investigación-Acción». (Perissé, MC; 2024)
3. Organización del trabajo académico
Nuestra misión es la de desarrollar un sistema de información científico y académico que sea de utilidad para los procesos de investigación, desarrollo e innovación productiva que atiendan a necesidades sociales y económicas concretas y justificadas (Market-Pull); y principalmente, apto para la «Ciencia Abierta» (Open Science) (UNESCO 2021, 2-4,7.12,18-19,23,26-27,36). La implementación del sistema ha de permitir divulgar, hacia la sociedad, y difundir, para la comunidad científica, las evidencias científicas resultantes de la investigación científica (Science outreach); y por, sobre todo, constituirse en un valioso instrumento para el proceso de enseñanza-aprendizaje en el marco del «aprendizaje activo» (Action learning) (Lewin 1946) (Stenhouse 1989) (Bunge 2006, 20). Este enfoque, garantiza una comunicación dinámica, integra, y transparente de conocimientos científicos de alta calidad, que son necesarios en las labores académicas y científicas de construir saberes que brindan soluciones a problemas relevantes para la sociedad.
De este modo se enriquece el proceso educativo entre docentes y estudiantes, en un marco denominado: Entorno Personal de Aprendizaje (PLE por sus siglas en inglés: Personal Learning Environment), el cual se ve constituido por las siguientes actividades:
- buscar y seleccionar la información de interés,
- organizar los contenidos,
- comunicarse con los demás, a través de una Red Personal de Aprendizaje (PLN por sus siglas en inglés: Personal Learning Network),
- crear nuevos contenidos,
- publicarlos para compartirlos con la comunidad, y
- colaborar comunitariamente en tareas de producción científica y académicas.
En cuanto al ámbito de la «enseñanza activa» y en particular el aprendizaje basado en proyectos, se precisa establecer el proceso de enseñanza-aprendizaje de forma efectiva; para lo cual, y en nuestro caso, se propone proveer un sistema de comunicación dirigido por académicos bajo el «Modelo PRC»: Publicar – Revisar – Curar; con foco en la «curación digital» y más particularmente en la «curación de contenidos» (Guallar, Hernández-Campillo y Codina 2022), como método sistemático que permite: identificar, evaluar, e interpretar trabajos de investigación en un campo de conocimiento científico determinado, a través de los siguientes pasos: búsqueda, selección, caracterización, y difusión de información.
Para que los docentes realicen una buena curación de contenidos, todo centro de capacitación, información e investigación educativa, debe proveerle al docente, un «marco de competencias» en gestión de información, lo que enriquece las capacidades para realizar una revisión de literatura científica (sistémica o mejor aún sistemática) (Codina 2023), donde el principal resultado es el de alcanzar una «organización científica del trabajo creativo», permitiendo que el docente curador se actualice constantemente en la gestión de su propio aprendizaje, donde primero aprende de lo que está expuesto en los libros, para luego aprender y enseñar sobre las propias investigaciones (Kuhn 2004, 20).
Referencias
Bunge, Mario. 100 ideas: el libro para pensar y discutir en el café. Debolsillo, 2006.
Codina, Lluís. Revisiones de la literatura con aproximación sistemática: scoping reviews. México: Univ. Rosario Castellanos, 2023.
Guallar, Javier, Thais Raquel Hernández-Campillo, y Lluis Codina. «Curación de contenidos en artículos científicos. Categorías y casos.» Telos: Revista de Estudios Interdisciplinarios en Ciencias Sociales 24, nº 3 (2022): 469-490.
Kuhn, Thomas Samuel. La estructura de las revoluciones científicas. México: Fondo de Cultura Económica, 2004.
Lewin, Kurt. «Action research and minority problems.» Journal of Social, 1946: 34-46.
Stenhouse, Lawrence. Research as a Basis for Teaching. London: Heinemann Educational, 1989.
UNESCO. Recomendación de la UNESCO sobre la Ciencia Abierta. Paris: Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, 2021, 34.